Blogia
ENTRE LINEAS

Vidas paralelas

Vidas paralelas

 

No, no me referiré a las vidas de las piernas que ilustran este escrito que sin duda llevan más de diez lustros juntas (doy fe) en esa posición es decir, una al lado de la otra en evidente paralelismo. No serán ellas las protagonistas o mejor dicho, no exclusivamente ellas, sino todo lo que las complementa. Si, porque voy a contar la historia de dos personas, que al cabo de los años se han vuelto a encontrar en ese punto en común, consecuencia que hubo una raíz única en algún momento de sus existencias. Es decir, por si alguien no se aclara con esta introducción, hablaré del que suscribe y de otra persona que se cruzó conmigo en la tierna infancia. Sin ánimo de desalentar a l@s romántic@s no será una historia de amor, de encuentros y desencuentros en los que, sin que esté mal decirlo, soy un auténtico campeón. Es la historia de un compañero del instituto del que no había vuelto a saber hasta que nuestros caminos se han vuelto a encontrar la friolera de treinta y cinco años después de separarse. Nos despedimos en el I.N.E.M (instituto nacional de enseñanza media) y nos reencontramos en el vestuario del gimnasio pijo . Es decir, nos vimos por última vez desnudos de experiencias y nos volvimos a encontrar nuevamente en pelotas, pero está vez en el sentido literal del término.

 

Es curioso el habernos reconocido porque la verdad no nos profesábamos simpatía alguna. Es más él me parecía un auténtico bobalicón. Era de aquellos que a los quince años aún llevaba pantalones cortos hasta en invierno, cuando eso era un síntoma no solo de inmadurez mental, sino también física. Además si llevabas pantalón corto no te comías un “rosco”. No es que los que llevábamos pantalón largo hiciésemos algo más, pero ya denotaba una predisposición a dejar de ser célibe en cuanto alguna buena fémina se nos pusiese a tiro. Supongo que yo a él, con mis pantalones largos y anchos que más que llevarlos, los arrastraba, le debía parecer un auténtico mamarracho. Pero bueno, nunca me lo dijo porque para colmo de sus males, no era una lumbrera en los estudios y alguna vez había tenido que recurrir a mis apuntes que, aunque suene pedante, eran de un asiduo a la matrícula de honor.

 

 

 

 

 

Le perdí la pista cuando acabamos COU, allá por 1973, el año en el que “Alguien voló sobre la tapia de un monasterio” y en el que el siguiente curso académico, en vez de empezar en setiembre, lo hizo en enero por obra y gracia de aquellos cambios en los ministros de educación que no en la educación de los ministros, a los que nos tenía acostumbrados el generalísimo. Precisamente cuando advino la democracia que supe de mi compañero poco espabilado del INEM. Se había apuntado al Partit dels Socialistas de Catalunya (PSC) y fue elegido regidor en el Ayuntamiento de Barcelona. Fue entonces cuando empecé a cambiar mi opinión sobre él y pensé que a lo mejor no era tan bobo, que se le veía un atisbo de lucidez mental. Ese pensamiento lo fui reafirmando a medida que veía cómo el iba prosperando dentro de la política mientras yo también prosperaba pero eso si, trabajando y estudiando por las noches. He ido siguiendo su trayectoria política, su ascenso en el Partit dels Socialistas de Catalunya en el que si bien no ha ocupado la primera plana de los titulares de prensa, si que ha tenido cargo de responsabilidad pública importantes tanto en el Ayuntamiento de Barcelona como, ahora, en la Generalitat de Catalunya.

 

Al encontrarme con él en un gimnasio de la parte alta de la ciudad, no puedo dejar de pensar en el paralelismo de nuestras vidas que nos han llevado a coincidir en ese presente al que a él le llevó la política y a mi el trabajo. No le cambio su lado de la paralela. Me conservo mucho mejor que él.

 

 

4 comentarios

poker-vs-poker -

Thanks for a very well thought out piece. Many great ideas here.
Good luck!

Rotci -

Vidas paralelas...Son un juego del destino, lo he pensado así, porque aveces ocurre lo mismo de manera al reves, como si fuese un espejo en el cual te ves, pero de manera contraria preguntandote como hubiese sido si... En fin, es bueno saber que aveces hay vidas en las que los personajes principales sólo tienen en común el conocerse...

Para Noa- el premio de la blogería -

Y yo, por una vez, a las páginas personales les llamaré en su acepción inglesa... ¡Para que no se diga que no soy moderno ! ;-D . Un beso querida Noa-

Noa-. -

Eso de conservarse mejor que él debe ser porque la política desgasta mucho... o tal vez por su pasado de pantalón corto... pero venga... que de vez en cuando no va mal que a uno le regalen los oídos... seguro que es porque tu matería prima es de mejor calidad :-)